Jose Socrates (Portugal) Jose Luis Zapatero (España) Giorgios Papandreus (Grecia)
Europa, continente al que nos han dicho que siempre debemos de mirarnos para aprender, hoy nos sorprende porque varios de los países que integran su comunidad están atravesando una crisis económica fenomenal, de la cual piensan salir aplicando planes de ajuste, que solo aumentaran su deuda, sus desocupados y su integridad como comunidad. Eso lo sabemos nosotros, los argentinos y los sudamericanos, porque hemos sido victimas de esos planes propuestos por el FMI y los países lideres que lo apoyan.
Hay otra nota dramática mas si quiere, los tres países que llevan a cabo estos planes de ajuste son de orientación socialista. José Luís Zapatero, en España; José Sócrates, en Portugal y Giorgios Papandreus en Grecia. Es esto casual o la aplicación de políticas neoliberales como salida de la crisis es el jarabe que todos los debemos beber.
Hoy la Unión Europea (EU) tiene solo 6 países gobernados por socialistas o socialdemócratas de los 27 que la integran: España, Portugal, Grecia, que son los más importantes además de Chipre, Eslovenia y Austria. Esto no siempre fue así. En 1995, de los 15 países que formaban entonces la Comunidad Económica Europea, tan solo 5 tenían gobiernos conservadores. En la EU hoy manda la derecha, no solo si tomamos en cuenta país por país, sino también en los organismos supraregionales. En las elecciones al parlamento europeo de 2009, los partidos y alianzas de centro derecha obtuvieron una amplia victoria. La Eurocámara actual esta conformada por 403 escaños de democristianos y liberales y 274 que agrupa a socialistas, ecologistas, comunistas e independientes.
La crisis
Para la mayoría de los expertos la crisis económica originada en EEUU por la quiebra de Lehman Brothers y la consecuente recesión global hizo necesario tomar medidas drásticas.
“Las durísimas políticas de ajuste llevadas a cabo por los gobiernos como solución (acertada o no) les han acarreado un desgaste brutal. Los poderes ejecutivos europeos han optado por combatir la crisis y reducir sus déficits a base de recortes sociales y tijeretazos presupuestarios, y con políticas donde apenas es distinguible el color político y ya sólo queda un color, el financiero. La ideología, como en el caso de España, ha salido de la economía y ha quedado reducida a otros ámbitos más relacionados con los valores o las costumbres (igualdad, aborto), ámbitos que, con ser también importantes, no afectan directamente al bolsillo de la gente.”
En general los ciudadanos mas castigados son personas que están perdiendo lo que tenían, mas que personas que nunca ha tenido nada.
Obviamente que hay diferentes lecturas para explicar esta situación de gobiernos de izquierda tomando soluciones de derecha para solucionar sus crisis. Para algunos todo iba bien cuando eran las épocas de las vacas gordas, “economía de mercado con un toque de izquierdismo social”. Luego estas políticas del capitalismo mas puro, consumo mas endeudamiento especulativo, encontró a los socialistas en el poder y les toco hacerse cargo de una crisis que no generaron, pero tampoco sabían como salir, o lo sabían y no se animaron y apelaron a soluciones de derecha para salvar la economía y lo mas probable es que si eso ocurre los a encontrar fuera del poder.
El desencanto
El electorado socialista o socialdemócrata a optado por castigar a sus representantes optando por movimientos “minoritarios o emergentes, en los que ven mejor representadas sus aspiraciones de auténtico cambio social, desde los verdes (Alemania) hasta los indignados del 15-M (España)".
Los votantes tradicionales de la izquierda ven con buenos ojos las revueltas árabes en todo lo que tiene que ver con el deseo de una política que vuelva a estar con los ciudadanos de a pie, y no sólo en las sedes de los partidos.
Los partidos socialdemócratas tradicionales se enfrentan con “estructuras organizativas caducas, más propias del siglo pasado que de una sociedad como la actual, donde la comunicación es cada vez más horizontal (Internet, redes sociales, globalización de la información, efecto contagio) y cada vez menos vertical (líder, partido, rueda de prensa, militantes, fidelidad). Estructuras que, en muchos casos, y aunque no siempre, son ajenas o no saben dar respuestas claras a los problemas de los que habla la gente en la calle. La percepción de una buena parte de los votantes potenciales de muchos partidos socialdemócratas es que hay más debate sobre el reparto de poder interno que sobre las ideas. Los jóvenes de Sol, los indignados del 15-M, buscan un cambio profundo en la forma de gobernar, no un simple cambio de caras.”
El “ideario socialdemócrata (equidad fiscal, financiación de servicios públicos, economía mixta, ecologismo, multilateralismo, estado del bienestar, secularismo, progresismo) en la práctica pasado a un segundo plano, diluidos entre la supuesta necesidad de combatir la crisis económica con recetas impopulares, y las luchas internas por el poder político.”
Queda por saber si los socialista vernáculos aplicarian las mismas medidas, en el hipotético caso de acceder a la conducción del país, que sus pares en Europa.
Fuente: http://www.20minutos.es/noticia/1066403/0/crisis/izquierda/europa/